Se trata de una idea propuesta desde el Instituto Andino Patagónico de Tecnologías Biológicas y Geoambientales (IPATEC, CONICET-UNCo), que fue seleccionado para su financiamiento.
Son dos desarrollos que ya cuentan con cierto grado de avance, uno tiene que ver con un prototipo de microscopio y el otro con un módulo dentro de un software complementario a tal equipo. El propósito es completar el desarrollo y validación de un sistema óptico de bajo costo (brewscopio.ar), así como la automatización del análisis de imágenes por machine learning, para el control de calidad de levaduras con el fin de ser incorporado al exitoso software microbrew.ar.
De esta forma se crea una innovadora plataforma para la gestión y control de las fermentaciones.
El grupo de trabajo formado por Carlos Bertoli, Clara Bruzone, Julieta Burini, Juan Eizaguirre y Diego Libkind, desarrolló hace más de cinco años microbrew.ar. una aplicación para facilitar y darle herramientas a los productores de cerveza en la gestión de las fermentaciones.
“Se tiñen las levaduras con una coloración vital, que diferencia células vivas de muertas; esa distinción de color permite calcular el número de células que están vivas (viabilidad). Cuando hay un porcentaje alto de células teñidas (muertas) se considera que esa crema de levaduras no está en condiciones de ser reutilizada” detalló Libkind, científico del CONICET y director del IPATEC.
El proceso de reutilización de levaduras cerveceras conlleva una compleja metodología de trabajo, que hoy es coordinado con la observación de un operador y puede tener márgenes de error humano.
“Con microbrew.ar lo que estamos buscando es que los usuarios tomen las fotos y que el software, utilizando herramientas de Inteligencia Artificial, les devuelva de forma automática el resultado de cantidad de células vivas y muertas, y con eso puedan tomar decisiones sobre qué hacer con esa crema de levaduras, si es adecuado utilizarla, y cuánto poner”, detalló Libkind, líder del grupo desarrollador al cual en esta nueva etapa se sumaron Macarena Romero Rojas y Pablo Gutierrez.
Por otro lado, y unido al proyecto del módulo del software se ideó un dispositivo óptico de bajo costo que permitiría sacar las fotos sin la necesidad de un microscopio. Al respecto, Libkind explicó que “sería algo accesible a todos los productores, porque hoy existe un porcentaje bajo de productores que tienen un microscopio para poder realizar este análisis. Entonces desarrollamos un prototipo, que gracias al financiamiento vamos a mejorar, para luego asociar este hardware al módulo del recuento automático”.
El acompañamiento de la Provincia permitirá validar ambos proyectos, logrando así un equipamiento de bajo costo para el productor.
Luego de concretada la parte del proyecto de validación, otro de los objetivos es transferir este conocimiento ya que la provincia de Río Negro tiene registrados 70 productores cerveceros y existen cerca de 1900 en todo el país.