Es de destacar que con los principios de solidaridad, equidad y progresividad en los que se basa su régimen de aportes, el IPROSS estableció un esquema escalonado y progresivo de implementación del nuevo cálculo para los aportes de sus afiliados.
El objetivo es generar un impacto financiero positivo en los ingresos del IPROSS, que repercutirá en beneficios para los propios aportantes, algo en lo que Ávila y Molina coincidieron.
Además, abordaron la situación general de la obra social y la planificación de la nueva gestión al frente de la institución. Una de las urgencias es mejorar su funcionamiento, para fortalecer la atención a los más de 170 mil afiliados y llegar más y mejor a cada uno de ellos.
Ambos resaltaron lo importante del encuentro, para generar un canal de diálogo constante y trabajar en conjunto para mejorar el sistema prestacional en toda la provincia y sus subsedes.
IPROSS cuenta con delegaciones en 43 localidades, Capital Federal y Bahía Blanca.