De esta forma, las familias que no cuentan con el servicio de gas, reciben la leña fraccionada y embolsada, lista para calefaccionar.
Los operativos comenzaron en el mes de mayo, como cada año, permitiendo atender las necesidades de las familias de la Región Sur y la zona Andina.
Originalmente se distribuyeron más de 1.800.000 kilos, que se suman a los 300.000 kilos de refuerzo por las condiciones climáticas extremas que se están atravesando este invierno.
En caso de ser necesario, se prevén más entregas.