El gobernador Alberto Weretilneck instruyó al ministro de Seguridad y Justicia, Gastón Pérez Estevan, para que coordine el trabajo conjunto entre la policía provincial, el Ministerio de Seguridad nacional, las fuerzas de seguridad federales y los equipos especializados del Servicio Secreto, la Casa Blanca y la Embajada de Estados Unidos en Argentina.
De esta manera, Pérez Estevan mantuvo diversos encuentros con los representantes de los distintos estamentos de seguridad. En este ámbito se definió conformar un comando conjunto entre todas las fuerzas -coordinado por un referente de Gendarmería en Bariloche- para la ejecución del plan operacional desarrollado por el Servicio Secreto, agencia estadounidense encargada de la seguridad presidencial.
La Policía de Río Negro sumará 250 efectivos a los que ya se desempeñan en la ciudad para, junto a la Gendarmería Nacional, trabajar en el operativo de tránsito en el tercer anillo de seguridad, mientras que el personal especializado de la Casa Blanca se encargará de la seguridad en los primeros dos anillos.
Además, la Prefectura Naval Argentina controlará el tránsito marítimo y la Policía de Seguridad Aeroportuaria estará al frente del control en el aeropuerto de Bariloche y en el helipuerto del hotel Llao Llao, donde se alojará el Mandatario norteamericano.
“La Policía pondrá todos sus recursos a disposición para encarar el operativo de seguridad”, destacó Pérez Estevan, quien sostuvo que el Servicio Secreto estadounidense “nos solicitó que pongamos personal policial a disposición, así como bomberos, hospitales y los equipos especiales y trabajos de inteligencia”.
“La gente de la Casa Blanca y del Servicio Secreto reconoció la predisposición y rescató el trabajo en conjunto. Además se mostraron sorprendidos por la preparación de las fuerzas federales y de nuestra policía provincial”, sostuvo el funcionario.